
Psicología inversa es la manera en la que puedes motivar a alguien para que haga algo al decirle que haga exactamente lo contrario.
Por ejemplo, decirle a tu amigo "Apuesto a que no puedes llegar antes de las 6" podría motivarlo a hacer lo contrario sólo para demostrar que estás equivocado.
Psicología inversa es un arma peligrosa, porque si la persona con quien estás tratando se da cuenta de que estabas tratando de manipularlo, podría ser capaz de no confiar en ti otra vez. Es por eso que la psicología inversa sólo se debe utilizar en la mente subconsciente de la persona y no en su mente consciente.
Por lo tanto, para que la psicología inversa pueda ser utilizada correctamente, debes 1) hacer que esa persona piense que realmente crees en tus palabras, y 2) que entienda que no se lo estás diciendo para motivarlo.
Derecho de autor reservado por Mariela Figueredo y Miguel Andrade